Siente más, piensa menos
Los círculos de mujeres son espacios de reunión en los que las mujeres acuden al llamado de su loba interna, para dar y recibir equitativamente, acompañando y dejándose acompañar por la red de la tribu que creamos entre todas.
Todo lo que se genera en el círculo, se queda en el círculo, se abre espacio medicinal cargado de un profundo respeto a la ancestralidad femenina.
En el círculo todas somos iguales, cada una tiene una voz que es libre de expresar y las demás permanecemos en escucha activa, no damos consejos, no interrumpimos, no estamos pensando en lo que vamos a decir. Estamos en presencia, honrando la voz de cada hermana, abrazando el dolor de cada hermana y celebrando la alegría de cada hermana, validando y reconociendo que lo que transita la mujer que tengo a mi lado también forma parte de mí.
Se crea una sinergia que va despertando la medicina que cada una tiene, de manera muy orgánica y sutil, vamos activando la memoria de la Diosa en nuestros úteros y corazones.
Los círculos que guío están sostenidos por la frecuencia de la Gran Madre Divina, según el tema a trabajar, se manifiesta en forma de alguna Diosa o Maestra Ascendida, Kali, Isis, Afrodita, María Magdalena, Madre María, etc.
Hay una parte de meditación en la que activamos la abundancia del útero, abriéndolo a la vida y conectando con la Tierra, confiando en la Madre para dejarnos sostener por ella.
Según el tema a profundizar, la meditación irá seguida del contacto con el cuerpo-templo a través de la danza, del canto ancestral, desbloqueando nuestra expresión, o de alguna actividad que realicemos en grupo, como tejer ojos de Dios, por ejemplo.
Finalmente, hay una parte donde integramos los nuevos códigos energéticos que se han despertado y volvemos a compartir sentires, desde el lugar de unión interna, que se ha creado con la magia de todas.
Siente más, piensa menos